Una vez recogidos los trastos de la carreta, guardados los trajes y limpiado las botas, es hora de mirar "pa tras" y hacer balance de esta Romería 2010.Salvo por un pequeño retraso, a la hora de colocarnos, la romería ha transcurrido con toda normalidad.
El tiempo ha acompañado y los romeros de esta peña han dado toda su alegría y camaradería para que todo fuese sobre ruedas.
Las nuevas incorporaciones, Isabel (madre e hija) y Laura, se han acoplado a la perfección y esperamos que el próximo año, se vuelvan a subir a la carreta. Pineda, nuestra invitada de intercambio, también se adapto fantásticamente, tanto que parecía que llevara toda la vida subiendo al santuario.
Y como dice Toledano, que lo nuestro, es una carreta SEÑORIAL, el resto, todo lo hecho o dicho, quedará para nosotros, para nuestra intimidad, para nuestros recuerdos, para nuestro corazón.
Ahora solo resta esperar, ir tachando días en el almanaque, hasta que llegue el próximo Abril, en que volvamos a sacar los trajes y nos volvamos a colgar la medalla.
